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El proyecto supondría la transformación de Arroyo de la Miel y contempla más de 57.000 metros cuadrados de uso comercial, un hipermercado, varias salas de cine, tres edificios de oficinas, un auditorio y un hotel. La superficie de Tivoli World no variaría y el parque mantendría su nombre, aunque sería sometido a un profundo proceso de remodelación con la instalación de 43 atracciones entre las que destacan un espacio para demostraciones de trucos extremos y una estación con nieve artificial que ocuparía la zona sur casi por completo.
La titularidad del parque de atracciones de Benalmádena supone el principal escollo para sacar adelante este proyecto. Tremón compró Tívoli al empresario Rafael Gómez (conocido como Sandokán) y dueño de la empresa Arenal 2000, en una operación que incluía la venta de 700 hectáreas repartidas en una treintena de propiedades ubicadas por toda Andalucía, pero Rafael Gómez denunció que la compra no había llegado a completarse y trasladó el asunto a los tribunales por presuntos impagos. Debido a esta situación, la titularidad de Tivoli World pertenece a Tremón aunque el parque siga gestionado por una compañía vinculada al empresario cordobés, recientemente condenado a cinco años de prisión por delitos contra Hacienda.
Tremón ha mostrado su disposición a levantar el proyecto, con una inversión superior a los 300 millones de euros, en cuanto finalice este tortuoso proceso judicial y la propuesta ha convencido al Ayuntamiento de Benalmádena, interesado en agilizar el proceso administrativo al considerar que la creación de empleo y el impacto económico del complejo constituirán una oportunidad única para reactivar el tejido comercial de Arroyo de la Miel. El proyecto supondría la creación de más de 1600 puestos de trabajo directos durante las obras, que se prolongarían durante dos años, y otros 3300 puestos tras su construcción.
Los accesos supondrían uno de los mayores obstáculos administrativos pero para solucionar este problema Tremón propone una serie de obras de urbanización destinadas a mejorar las conexiones viales desde la Costa y Benalmádena Pueblo. La futura remodelación de la entrada a Arroyo de la Miel desde la A-7, en el kilómetro 222, sería fundamental para obtener la aprobación del Ministerio de Fomento. Las mejoras en el acceso desde la autovía ya cuentan con una partida plurianual superior a los 17 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado. Con independencia de esta actuación, el grupo estima que la conversión de Tivoli World "en un importante polo de atracción de población" requeriría obras en otras carreteras por valor de 9 millones de euros, cantidad contemplada en el proyecto para la ampliación de rotondas de acceso y pasos inferiores, la duplicación de carriles o el desdoblamiento del tramo de la avenida que conduce al parque.
El reparto del espacio edificable dedica 24.177 metros cuadrados a las oficinas y 3276 metros cuadrados a los cines. El proyecto contará también con una zona verde de más de 17.000 metros cuadrados y una plaza peatonal.
Entre las atracciones incluidas en la remodelación de Tivoli World destacan una noria de grandes dimensiones, una mini Fórmula 1, una montaña rusa, una Expedición Everest, dos caídas libres, un jurásico, un doble carrusel, una montaña de agua, otra de truenos, una Hollywood Tower y el clásico pasaje del terror, según el Diario Sur.
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